Resident Evil 4 – LET’S PLAY – ¡Necesitaremos un barco más grande!
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Se sienta frente a una cámara en una de las habitaciones de su casa, se conecta a Internet y empieza a hablar. Lleva ropa cómoda, o a veces incluso un pijama, con un café o un refresco a mano. Habla de todo, comenta los últimos vídeos virales o juega con el ordenador. Parece el trabajo más fácil del mundo, pero no lo es. Porque lo que hacen realmente estos YouTubers, muchos de ellos ahora también streamers, es entretener a la gente. Y eso no es fácil. Hacer que el usuario que está al otro lado de la pantalla quiera ver tu canal y no cualquier otro de los millones disponibles es complicado y requiere horas de trabajo, sacrificio, mucho ingenio y, casi seguro, un poco de suerte. Si además estos usuarios deciden pagarte una pequeña cantidad cada mes por ver contenidos que están disponibles de forma gratuita, eso es la guinda del pastel y sólo lo consiguen muy pocas personas que pueden ganarse la vida como creadores de contenidos en internet.
Aunque empezó en YouTube hace casi 15 años, se cambió a Twitch, que pertenece a Amazon, y resultó un movimiento positivo. Este mes, por primera vez, se ha convertido en el streamer de habla hispana con mayor número de suscriptores de pago del mundo.
Hagamos esto | PORTAL 2 #1
Cristina López Pérez (Provincia de Tarragona, 15 de noviembre de 1989), más conocida como Cristini, es una streamer y reportera de esports española[5] Es la presentadora del programa de Ubeat “Hoy No Se Sale”, así como colaboradora de Zapeando y Vodafone Yu.
En Twitch tiene más de 2,8 millones de seguidores y más de 88 millones de visualizaciones, lo que la sitúa en el octavo puesto de los streamers de habla hispana con más visualizaciones en la plataforma[6] En YouTube tiene más de 1,3 millones de suscriptores en su canal principal. Fue nombrada una de las streamers más influyentes de España según la lista Forbes en 2021,[7][8] fue la cuarta streamer femenina más vista del mundo durante 2021[9] y fue la ganadora del premio a la mejor reportera de esports en 2021 en los Esland Awards.[10][11]
Nació el 15 de noviembre de 1989 en un pueblo de Tarragona, España, y ha vivido la mayor parte de su vida en Cataluña. Se define como “mayoritariamente andaluza”, gracias a su rama familiar en Granada[12].
Estudió en la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona. Obtuvo 2 licenciaturas, 1 máster y 1 grado superior. Ha estudiado informática y administración de empresas. Además, domina cinco idiomas, entre ellos el ruso y el francés. Empezó a trabajar en varios sectores hace muchos años, incluyendo la recepción de un hotel, trabajos de administración de oficina, e incluso como asistente de ventas en una cadena de videojuegos[13].
$moke – voices in the wind (demo); sub.español
Sí, ayer hubo una nueva entrega de ‘Disaster Chefs’. Concretamente, el programa número tres. ¿Cómo describir todo lo que pasó en pocas palabras? Pura emoción. El corazón casi se nos sale por la boca en varios momentos (y no, no estamos exagerando). Viruzz y Sandor fueron los ganadores del día y ya tienen asegurado su pase a la gran final (junto a Paula Gonu, Werlyb, IlloJuan y ElBokeron).
Ibai y Masi nos regalaron algunos momentos épicos, pero más allá de hablar de lo ocurrido en este episodio, estamos aquí para comentar el gran look que se marcó Masi. Un acierto de pies a cabeza (porque esos dos moños de dos mil años no pueden ser más adorables, por favor). Por cierto, aprovechamos para recordar que aún nos estamos recuperando del top a todo color y las boxer braids que lució en el programa anterior.
La presentadora deja claro que de los básicos renovados se vive, y muy bien. Así, vemos a Masi con un top de ojal de Bershka, que además está en una versión estampada que nos flipa. Este diseño nos ofrece varias posiciones, ya que la modelo coloca los dos tirantes en el mismo lado, mientras que la guía ‘Disaster Chefs’ juega poniendo cada tirante en un lado del cuello. ¿Lo mejor de todo? El precio: 15,99 euros.